Tener una banda y saber tocar la guitarra no es necesariamente un logro. Los triunfos van mucho más allá que los amigos, la polola y una radio los apoye, a veces el éxito es poder hacer lo que uno siempre quiso, o en algunos casos hasta que miles reconozcan lo que hacemos. Eso dependiendo de las ambiciones y necesidad de cada uno. Pero de ahí a ponerse a exigir reconocimiento es otra función.
A lo largo de los años he visto como muchas bandas y músicos se quejaban con la secretaria del sello BMG porque habían dejado sus maquetas y nadie los había llamado para firmarlos y convertirlos en estrellas "porque es realmente bueno". Y si eso no fuera suficiente "Somos mucho mejores que la mayoría de los grupos que han lanzado acá". O basta con esperar unos minutos en la recepción de IARC (el mayor consorcio radial de Chile) y presenciar como hay músicos emergentes que se quejan "por qué tocan tanto ese grupo si el mío es mejor". Y principalmente apuntando hacia Radio Uno, que con el eslogan de la "música chilena" tiene muchas más opciones pero menos parrilla que cualquier otra emisora local, porque son sólo canciones hechas en el país. Entonces cualquiera que logra grabar una canción o un disco cree, inocentemente, que va a sonar en la radio por el hecho de tener pasaporte chileno. Pero esto es mucho más que una cuestión gustos, y ni siquiera de industria porque los sellos pesan cada vez menos.
La decisión es editorial, como en cualquier medio de comunicación donde se decide que tema, noticia o hecho vale la pena rescatar, entre las miles y millones de opciones. Aunque también hay una base que tiene que ver con un buen sonido, con la estructura popular de duración, estrofa, coro y algún tinte que sirva para distinguirla entre las cientos de canciones nuevas que llegan a diario a un radio. Con más o menos razones que las que pueda tener un artista conocido y un emergente en boga. Pero la radio no tiene porque ser un medio de caridad para todo quien quiera tomar una guitarra y hacer música. Para eso está Internet, y los buenos talentos están por sobre las decisiones editoriales o la interferencia que puedan generar los medios de comunicación en todo esto.
Bandas como Matorral o Perrosky, a pesar del apoyo de la prensa musical, no están en la programación de las radios más escuchadas (si en la Universidad de Chile por ejemplo), pero ese no ha sido el impedimento para que ambos siguieran funcionando, aunque también es verdad es que fue la radio la que impulsó el éxito de los grupos chilenos más populares y para que bandas más recientes como Francisca Valenzuela, Teleradio Donoso y Juana Fé ganaran nombre en el mercado. Pero sonar o no en una radio no es definitorio para nadie, grupos como Monik, Sónica y hasta el ahora candidato Claudio Narea han contado con apoyo de las radios y eso no fue garantía de nada. No hay músicos con más derechos que otros, sólo que tal vez tienen mayores oportunidades.
Y no estoy de acuerdo con que se deba exigir un apoyo mínimo de música local a las radios. Estos medios son empresas con un movimiento publicitario y no es exclusivo de estas la responsabilidad sobre si debe o no promocionar la música chilena. Y en tal caso, ¿se les pedirá lo mismo a diarios, revistas y canales de televisión donde casi no existe cobertura ni presencia de músicos locales? Además que tipo de música es la que se debe programar, porque según la linea musical de cada emisora algunas radios no tendrán más de 10 opciones de grupos para tocar.
Todos íbamos a ser estrellas de rock pero con mucho trabajo y dedicación algunos alcanzaron a brillar más que otros. Esos músicos que no perdieron el tiempo comparándose ni imitando a los demás, los que ganaron son los que se dedicaron a ensayar, a hacer lo que querían arriesgando y probando suerte. Quizás a algunos y muchos grandes talentos esa suerte nunca les llegó, pero ahora gracias a Internet sus tumbas tienen más fans que dejan flores.
Por eso para los que ahora quieren sonar en la radio, tocar y hacer más música la única misión es aprender bien lo que se está haciendo, encontrar un foco y todo lo que sigue llegará por si sólo, como en las grandes y mejores historias del rock&roll. Y si no pasó, no paso no más, pero al menos lo intentaste, total de eso se trata la vida, de intentos, decisiones y hechos, y para eso ni siquiera es necesario tocar tan bien ni escucharlo todo, basta sólo con descubrirlo.
Por eso para los que ahora quieren sonar en la radio, tocar y hacer más música la única misión es aprender bien lo que se está haciendo, encontrar un foco y todo lo que sigue llegará por si sólo, como en las grandes y mejores historias del rock&roll. Y si no pasó, no paso no más, pero al menos lo intentaste, total de eso se trata la vida, de intentos, decisiones y hechos, y para eso ni siquiera es necesario tocar tan bien ni escucharlo todo, basta sólo con descubrirlo.
COLUMNA ARCHIVO
"Si hay bandas que deciden disolverse no es culpa de Aldunate ni de RockandPop ni de otra radio, sino que es simplemente inmadurez y falta de voluntad de un joven talento que renuncia porque el camino al éxito es demasiado largo para sus ambiciones" LEER MÁS