La cada vez más desorientada pauta de Lun terminó por inventar una nueva tribu. Debido al exceso de "Pokemones" en tv, el diario más leído del país decidió lanzar a los denominados "Shuper" al coladero de circuitos urbanos que se dividen la capital. Pero esta vez, creo, se les pasó la mano.
Los "Shuper" tienen un estilo de vida, una mirada y un circulo social mucho más limitado, se sienten cercanos a la cultura y caminan por Barrio Lastarria y Bellas Artes. Una de las mayores tonteras que he leído en el último año después del lanzamiento de la carrera solista de kel, ex Sick Pack.
Yo ya asumi que a LUN le obseciona andar etiquetando a la gente o abanderizar todo lo que no conocen, pero esto me parece, peligrosamente, un relleno de pauta. Y más encima llegan bién tarde al "fenómeno" porque entre las caracteristicas de este grupo "shuper alternativo" dicen que escuchan Radio Concierto, seguramente desconociendo que desde hace meses la 88.5 es una radio adulto fome, con música ochentera.
Aunque lo peor del artículo son las declaraciones de la actriz, y comediante del Club de la Comedia, Natalia Valdebenito que divide a este grupo en dos segmentos: "El arribista que va a Merced porque ahí hay gente con onda y quiere ser uno de ellos, y el cuico no asumido, abajista, que se compra poleras rotas a propósito. Es gente que igual vive de las apariencias, se hace la shuper interesante, y no saben mucho. Sienten que nacieron en el lugar equivocado". Sólo le falto decir que les gusta tomar fotos y leer Zancada. De hecho, Cabra Chica Gritona tenía mucho que ver con esta categoría por lo que parece Natalia conoce muy bién de lo que habla.
Sin embargo, estas definiciones a mi no sólo me parecen innecesarias sino que también dañinas para una sociedad que pretende ser más libre y tolerante. Andar buscando delimitaciones estéticas o sociales para todo lo que nos presenta en la calle es retrogrado y discriminatorio. El fascismo social impuesto por el marketing, las revistas de moda y la (alguna) prensa apunta a imponer e incrementar las diferencias entre cuidadanos de un mismo territorio. Como si no "pisamos ná" el mismo suelo.
El informe de un portal entregó algunos caracteres al artículo de Lun; Gente que, quizás, no clasificó nunca en la Zona de Contacto (en papel), como columnista de Super45 ni lo aceptaron en Paniko ahora tiene su espacio en la web (Flicks, Myspace). Aunque si usted quiere reírse con un portal de ironías y burlas, mirandose el ombligo, visite PorlaPuta.
Pero hoy me precupan dos cosas, primero que Lun está desperdiciando centímetros al por mayor, con muy poca consistencia en los contenidos y demasiado titular injustificado. Hace rato que dejaron de ser prioneros en farándula y aún no reconocen la caída del término que elevo a Daniela Campos a la categoría de "famosa". Ningún medio de farándula puede seguir haciendo su pauta con el control remoto esperando ver qué pasa con "Amor Ciego" y "Pelotón". LUN, así como impusó la farandulización de contenidos y logró cambiar la dirección de pauta del resto de los diarios de circulación nacional, ahora tiene la opción de marcar la diferencia nuevamente, con un lenguaje más crudo, si fuera necesario (como hoy Larry Moe con Tonka), más análisis, crítica y un reporteo más esforzado que ver "lo que pasa" por la tele.
Pero tratar de imponer en pautas de los matinales un nuevo modelo de "tribu urbana" como los denominados "Shuper" es inconsistente e injusto. Ya bastante circo han hecho con los adolescentes maquillados para que ahora se les ocurra interrumpir la tranquilidad de barrios y zonas donde se ha capitalizado cultura, entretención o el "buen gusto". Santiago es más grande de lo que creemos y de seguro hay cientos de otras "tribus", comunidades, subculturas que pueden identificarse y decir algo tanto o más interesante. Un discurso que no sea necesaria y esforzadamente diferenciar su vida de los otros, o hablar de cómo su circulo se distancia del resto.
Problamente yo si estoy en una tribu, que tiene que ver con una identificación sexual, con ciertos gustos y con el trabajo que realizo, pero eso no excluye para nada a mis amigos que no viven en mi barrio, ni trabajan en la música y están casados con hijos, que son lo más interesante que hay en el mundo. Porque claro, podemos compartir experiencias que ninguno ha vivido y romper con las barreras que imponen definiciones subculturales en una nación como está. Y si bién, de una u otra manera, todos, caemos en calificaciones como, por ejemplo, "loca", "camiona" o "straight", son términos que se ocupan en parámetros de confianza y sociabilidad que no representan a nadie más que a quienes los emiten. No es lo mismo que yo utilice la palabra "maricón" a que Kike Morande lo grite en su programa.
De seguro usted conoce a una amiga que dice "si, yo tengo N amigos gays", bueno, ahora no le bastará con esa definición y ahora deberá especificar de qué barrio es su amigo gay y si le gusta el Bunker o el Fausto. O no sólo tendrá que contar la edad y la profesión, sino que además el tipo de cine, música y tienda de ropa favorita. Y en base a eso, saber a dónde mierda pertenece su amigo "gay".
Calificaciones de mierda que no ayudan en nada. ¿No les basta con decir, "humano", "persona", "amigo", "alguien a quien quiero mucho"?, sino que ahora hay que ponerle etiqueta hasta a lo que comemos. Me cansa todo esto, y leer este tipo de tonteras es una provocación para seguir hablando del mismo tema, y sin querer termino calificandome a mi mismo y a quienes supuestamente me rodean. ¿Por qué no puede ser más fácil todo esto y nos llamamos sólo por nuestros nombres?
Existe una necesidad por identificarnos, por encontrar personas que entiendan y compartan motivaciones, y desde esos vinculos ampliar nuestra educación y pequeño mundo. Pero hay maneras y formas de relacionarse, por lo que eso pertenece a la intimidad y no tiene por qué ser un objeto de estudio para el periodismo en práctica ni para un programa de magazine en la televisión.
Estoy preocupado, Lun ya no me hace reir y el barrio se esta llenando de "maricones". Habrá que moverse, tendre que cambiar de canal, de diario, de casa, de amigos, de trabajo, pero estoy "shuper" cansado, así que mejor les asigno una etiqueta y los dejo identificados y según la moda mañana veré donde mejor me acomodo. Por esta noche, dormire como "Homo" con mi novio "Emo".