18 feb 2007

La Tv en Sus Manos

"Hablar de operaciones, competencia y envidia en la televisión ya no es suficiente para la lucha por la sintonía y a partir de ahora serán los detalles de la vida privada de las personas en televisión. Aunque con contradicciones, porque sabemos muy bien que jamás SQP podrá hablar algo de Eva Gómez."
SQP lo hace de nuevo. Esta vez en la voz de la periodista Catalina Droguett el estelar farandulero lanzó al espacio un comentario que indudablemente no pasará inadvertido. Mientras se hablaba de la vida y obra del bailarín de Rojo Pablo Vargas la panelista sello los comentarios diciendo “En Rojo hay distintas alternativas sexuales. Entonces, no a lugar involucrar en romances a gente que no es así”. Imperdible, pero si es o no la situación del programa buscatalentos de TVN no soy yo él que tiene la misión de aclararlo, aunque tampoco es la responsabilidad de quienes están en ese panel. La TV y las pautas editoriales de la prensa no pueden estar en manos de este tipo de personas. La sexualidad pertenece a cada una de las personas y no es mérito ni menos un delito para cumplir con nuestro trabajo. Sabemos muy bien que este país tiene muchos asesinos, ladrones y panelistas de farándula por revelar y dar a conocer a la ciudadanía antes que andar comentando a medias lo que un joven muchacho pueda hacer en su vida intima. Y en el caso de Pablo Vargas el único juicio pudo estar en que su personaje televisivo es un referente para jóvenes y niños y su figura se ha visto involucrada en actos que si bien corresponden a comportamientos mal habituados en algunos jóvenes no son compatibles con el rol público que le ha denominado el canal estatal al presentar a su elenco de bailarines y cantantes como Ejemplos de la Juventud reiteradamente. Pero TVN tenía muy claro que tarde o temprano sus diseñadas polémicas televisivas con supuestos romances y conflictos en su joven y exitoso elenco tendría sus ecos. El fenómeno Rojo ha provocado, desde su creación, bastantes capítulos mediáticos y han formado parte importante en el desarrollo de la prensa farandulera de estos últimos años. Y es porque TVN lo que quiso así para potenciar su producto, y es porque la falta de conocimiento de los debutantes “Rostros” no tuvo mayor análisis en la inexperiencia de muchos de estos protagonistas, y ese descuido tarde o temprano provocaría hechos tan sucios y cobardes como los del día viernes en SQP. No es sólo el comentario de Catalina Droguett también es la omisión del resto de panelistas. Las palabras a medías de Nelson Pacheco o la cara de José Miguel Villouta cuestionaban esta idea de que el bailarín de Rojo haya o tuvo un romance con una de sus compañeras. Ninguno de los dos estuvo dispuesto a decir algo más claro, pero sus rostros llamaban a la infinita duda. Pero ambos, junto a Ignacio Gutiérrez y Italo Passalaqua, todos guardaron silencio antes las palabras de la rubia panelista. Eso es “mariconeria”. “¿Quién es ella para desmentir lo qué sucede al interior de Rojo?”, y después de esto esperaremos las pruebas, porque quiero que la periodista titulada demuestre su profesionalismo de una vez por todas. Y de paso, si su misión en la vida es comenzar a revelar la sexualidad de los chilenos famosos, la desafío a asistir a la puerta del Bunker y entrevistar a todos los “rostros” que sabemos asisten a la discoteque gay de Bombero Nuñez, y si no tiene la dirección que se la pregunte a cualquiera de sus compañeros de mesa. “La farándula se nos escapo de las manos” dijo Jennifer Warner y así estamos. Estamos justo en el camino para llegar hasta dónde nadie quería pero tampoco hicieron nada por detener. Porque hablar de operaciones, competencia y envidia en la televisión ya no es suficiente para la lucha por la sintonía y a partir de ahora serán los detalles de la vida privada de las personas en televisión. Aunque con contradicciones, porque sabemos muy bien que jamás SQP podrá hablar algo de Eva Gómez. La decisión de confesar públicamente el tipo de sexualidad que lleva uno en Chile y cualquier parte del mundo puede ser un signo de revolución, pero esa opción le corresponde a cada uno y no es justo que un programa de televisión use este tipo de recursos para rellenar las dos horas de transmisión. Claramente no hay más pauta. SQP intenta recuperar el liderazgo de sintonía que se ha visto cuestionado por su competencia en MEGA. Y a pesar del delicado estado de credibilidad que ha sufrido el espacio farandulero en los últimos meses gracias a las polémicas entre sus comentaristas y la ex conductora, Salvese Quien Pueda insiste en su formula, que si bien puede dar frutos en cifras y publicidad, puede ser muy peligroso para los integrantes de su panel. Porque si de investigación se trata, porque si de revelar intimidades, vida privada y detalles de la sexualidad aquí caen varios. Y no se trata de hacer un juicio moral, yo ni nadie está para eso, esto está exclusivamente en el plano profesional, entre lo que decimos, somos y nos comportamos. Hay que ser responsables, porque intentar perjudicar la vida profesional de un joven (eso intentan hacer) como Pablo Vargas puede ser el inicio para que entre dichos y declaraciones varios personajes televisivos (incluidos los panelistas del programa) ingresen al Tribunal Moral de los chilenos, y eso, como sabemos no le conviene a nadie. Así que debemos hacernos responsables de nuestros dichos. Repito RESPONSABILIDAD, y compartida, porque el silencio de los señores del panel que acompañaban a Catalina Droguett también puede ser juzgado en este proceso de dudas y cuestionamientos, que son bastante validos como espectador, persona, profesional, homosexual. Los cuestiono a ellos y a todos los que han recurrido a este tipo de elementos para aspirar a unos centímetros más en LUN, porque si este es su modo de trabajar, qué ineficiencia tienen sus vidas y le pregunto una vez más, ¿para eso estudio cinco años en la Universidad la Señorita? Bueno, habría que saber de que centro de estudios estamos hablando, porque no es lo mismo llevar un diploma UC que la UGM. Yo no haré mi juicio de valores de lo que sé de algunos de ellos, no es mi tarea, mi discusión es profesional y en eso terreno me gustaría ver más rigurosidad y profesionalismo en este tipo de medios, y si este es su forma de trabajar es que estamos mal, y mal del verbo MALDAD (yo malo, tu mala, ella mala, nosotros malos, ellos malos), entonces algunos tenemos que tratar de ser mejores, con argumentos y formación en la vida. Confío en que tarde o temprano los malos caerán. Por ahora con o sin SQP seguiremos trabajando por hacer de los medios de comunicación un espacio más justo, pluralista y representativo de nuestra sociedad. Y debo reconocer que me gusta la farándula, que veo SQP a diario, pero este modo de trabajar no me está gustando, y creo que tampoco puedo quedar indiferente. A esta Señorita hay que pararle el carro ahora, antes que su ambición de fama termine contaminando más el ambiente. ¿Está dispuesto el ex candidato presidencial y dueño del canal que transmite el programa a seguir teniendo en pantalla a este tipo de figuritas? Es el momento de sentarnos a pensar y discutir, o la “TV se nos escapara de las manos”.