1 jul 2019

Ley del telonero, oídos sordos

De los mismos creadores de la fallida "Ley del 20% de música chilena en radios" ahora el lobby va para imponer un telonero local a los conciertos internacionales porque según dicen esto ayudaría en la promoción de músicos chilenos.

Pero que nombren uno, den a conocer un caso, un ejemplo de un telonero chileno que se haya visto favorecido, beneficiado o haya mejorado su situación después de abrir un show internacional. Una ganancia que no sea el cheque de derechos de autor por haber tocado sino una reacción más significativa, como que consiguió que la agencia internacional se fijara en su talento y lo invitará a tocar a otros países, un sello grande lo contratara o que sus conciertos se empezaron a llenar más ¿Tienen una demostración de que esto sirve?, ¿Qué este tipo de normativas son útiles para el reconocimiento de la música nacional?    

Uno de los voceros del sindicato de músicos puso como ejemplo de logro que un integrante de los Red Hot Chilli Peppers miró desde el costado del escenario a la banda chilena que abrió su concierto. 

Distinto es un festival donde los músicos locales (muy especialmente algunos) elegidos se vuelven parte de la programación por cuestiones editoriales, los festivales son generadores de audiencias pero sabemos que el público de Lollapalooza o Fauna Primavera paga las entradas por los números internacionales y que disfruta todo lo que puede incluyendo los shows chilenos. 

Antes eran sugerencias de los sellos (Andrés de León abrió para Whitney Houston, Santa Locura a U2 o Solar a Soda Stereo) pero los motivos para elegir una banda de telonera se ha diversificado, sin embargo esos shows siguen sin pasar de la anécdota.

¿Alguien recuerda que María Colores abrió para Coldplay en el Estadio Nacional hace dos años? (además de la propia artista claro) que Los Tres telonearon a los Rolling Stone o ¿el nombre del grupo que tocó antes de The Cure? Es que si quieren apoyar la música chilena no es la forma. Tal como sucedió con la promocionada ley del 20% en radios que no ha cambiado la trayectoria de nadie, salvo más recaudación por derechos para algunos que ya sonaban antes. Y las productoras de conciertos al igual que las radios tienen líneas editoriales y modos de trabajo, si los obligan a poner un artista chileno son varias las formas de cubrir ese espacio. 

Pero el populismo está a flote en el Congreso y eso de "apoyar la música chilena" suena bien pero ¿qué saben los congresistas de música chilena? (¿Cuánto sabe la derecha de Inti-Illimani?, ¿cuánto conoce la izquierda de Alberto Plaza?). Los mismos que para sacarse la foto aprobaron "El Día del Rock Chileno" un gesto sin sentido interpretado por Florcita Motuda (qué mal le hace al gremio de músicos como representante). 

Hay un factor a favor de quienes exigen la normativa; La extensión de impuesto para eventos culturales, un formulario que las productoras llenan hasta por los shows de factura Disney y lo obtienen. Se busca exigir que a cambio de ese descuento contraten a un telonero nacional lo que puede convertirse en un negocio (deben contratarlos y recibirán los derechos de autor del total de la recaudación al igual que el artista internacional) pero el sentido de la iniciativa no es garantía de nada porque el público que llega antes a los conciertos estaría obligado a ver pero no necesariamente a escuchar.