25 abr 2019

Las razones del éxito de Paloma Mami

La más grande sorpresa de la música chilena de la última década tiene 19 años y solo tres canciones. Paloma Mami irrumpe como fenómeno digital y se ha convertido en la fantasía de millones, una bomba de talento combinada con sensualidad y la más difícil de las virtudes para una diva pop, su desbordante carisma.  

Dejando a un lado del caso de Mon Laferte porque su éxito llegó desde México el caso de Paloma Mami es un suceso inédito en la música nacional, al menos los números alcanzados digitalmente por sus singles superan todas las marcas locales. Y aunque su carrera está de la mano de Sony Music Latin en Miami el primer paso lo dio de manera independiente acompañada de su madre, hermana y un video que costó 300 dólares filmado en el patio del departamento de una tía. Y a 10 meses de su publicación el clip 'Not steady' tiene 45 millones de reproducciones y cientos de video-reacciones en distintos idiomas deslumbrados por la suavidad y elegancia del tema, una propuesta de sonido urbano cosmopolita con una intérprete de belleza exótica y actitud empoderada "Yo quiero un tipo que me de la talla, conmigo no te sirve toda esa labia" en perfecto espanglish. Paloma es hija de chilenos nacida y criada en Nueva York. 


Lo mejor de Paloma Mami es que es apta para todo público, tomando elementos del trap, reguetón y el soul su lenguaje es sugerente y romántico, una feminidad desafiante llena de sutilezas (“Sin querer le hago que gaste los fondos de la Visa”) sumado a un cuidado trabajo de imagen (una estética estilo Kim Kardashian) es una estrella fashionista que canta, baila y encanta. Por eso el desborde que causó en el reciente Lollapalooza con tres canciones.  


Si es trap -un género sin mucho requisitos- pero del costado bien facturado y definido, las canciones 'No te Enamores' y 'Fingías' cumplen con todos componentes de la cultura millennial, además de una intérprete auténtica cargada de encanto y carisma (que otros no consiguen con cinco discos o en veinte años de carrera). Y el envoltorio está tan bien llevado como el contenido, posee una dirección artística y calidad en cada paso que da junto a su equipo (las fotos en redes, un reality en Youtube y la acción de las comunidades y cuentas dedicadas a Paloma-Mami).  

Uno de los virales más repetidos es de su última participación en el programa de talentos Rojo Fama Contra Fama donde es ninguneada por su coach Leandro Martínez que tendrá que ver por el resto de su vida cómo dejó pasar a la próxima estrella latina. Pero se hizo justicia y semanas después Paloma Mami celebraba su anuncio en Times Square y recibiría un Disco de Oro en Estados Unidos por 30 mil descargas de 'No te Enamores' segundo sencillo que en cuatro meses ya ha superado las marcas de 'Not Steady' por sobre los 50 millones de reproducciones en Spotify y Youtube. Y esto es sólo el comienzo.   



En España toda la industria, los medios de comunicación y influencers han puesto la atención en el éxito de Rosalía (que en 11 meses acumula 70 millones de su canción más famosa 'Malamente') proyectada desde un mercado poderoso y que tiene más del doble de población que Chile. Todo indica que el suceso de Paloma Mami seguirá llamando la atención, pero no desde el medio chileno donde no hay medios y fuerza suficiente para competir en las grandes ligas de la industria latina (muy lejos y pocos consumidores). Sólo lo hizo Myriam Hernández cuando llegó por primera vez el Top10 del ranking Billboard desde Chile en 1989 (y luego marcó varios número uno) ahora es Paloma Mami la oportunidad de hacer historia en tiempos digitales. Lo tiene todo. 


21 abr 2019

Esperando Nada (1990-2010) 20 años de música popular chilena

El Chile de la Transición (1990-2010) coincidió con un estimulante movimiento discográfico producido por el posicionamiento del disco compacto en pleno desarrollo de la economía chilena. Entre 1990 y 2010 se comercializaron millones de casetes y cedes de música chilena, entre consolidados y nuevos nombres apoyados por la industria (los sellos, la radio, televisión, MTV Latino, el Festival de Viña) muchos que permanecieron y tantos otros olvidados. Los años noventa fue el nacimiento de la generación de Platino del rock chileno (La Ley, Los Tres, Lucybell, Chancho en Piedra, Joe Vasconcellos, Nicole), la consolidación de los baladistas revelación de los '80 (Myriam Hernández, Alberto Plaza, Pablo Herrera) y la irrupción de otras corrientes y subculturas como el hip-hop, punk y reggae que firmaron capítulos propios en la canción nacional y latinoamericana (Tiro de Gracia, Gondwana). 'Esperando nada' es un registro sobre veinte años de música popular chilena, de Ariztia o Fiskales Ad Hok, de Jorge González a Jano Soto, entre otros éxitos y fracasos, promesas incumplidas y clásicos de su tiempo. El auge y la caída del cede, la Transición política y la transformación discográfica entre 1990 y 2010, discos perdidos y otros trascendentes, sobre-vendidos y otros que merecían más oportunidades.... PRONTO + info Instagram  / Twitter / Facebook 

10 abr 2019

CONCIERTOS: Rufus Wainwright, hazlo tu mismo

Rufus Wainwright en Barcelona 2019
Si hubiese que encontrar un rol para Rufus Wainwright en la música pop de los últimos 20 años podríamos situarlo como un virtuoso y valiente, un artista disidente y de talento mayor, pasando del folk acústico y la canción tradicional en piano a la ópera o los espectáculos musicales siempre desde una mirada muy particular de la canción pop, más elegante, refinada y militante (como una de sus más populares 'Going to a Town' en la era Bush). Y anoche el neoyorkino regresó a Barcelona con un tour que celebra las dos décadas desde su álbum debut que revisó en completo y orden original ante un teatro El Liceu a un 60% de su capacidad.

Un espectáculo de casi tres horas incluyendo el entretiempo para separar los dos primeros discos revisados íntegramente además de un delicado y fabuloso cover de Joni Mitchell 'Both Sides, Now' y su más reciente canción 'The Sword of Damocles' (dedicada a la situación actual en Estados Unidos) ensamblando su voz y piano. Acompañado por cinco músicos que cumplen en los arreglos sin llamar más la atención, papel de las bandas sesionistas donde el cantante lo es todo. 

En su concierto Wainwright reúne humor, sarcasmo y elementos de la teatralidad, sonriente y afectado, pomposo y clásico. A ratos tiene coincidencias con lo que hicieron Elton John, George Michael o Freddy Mercury pero nunca tan pop, Rufus es más melancólico, controla los bordes y se atiene al libreto (se oyen breves pinceladas de blues y soul que podría profundizar). Para el cierre sus dos reconocidos covers 'Across the Universe' de Lennon y 'Hallelujah' de Cohen donde se entiende su papel como un cantante pop clásico sobre el escenario del teatro más antiguo de la ciudad y una audiencia mayoritariamente adulta. El músico debería estar ocupando el espacio de sus referentes fallecidos y brillar como uno de sus mejores discípulos pero él va a su camino propio, distinto y naturalmente más complejo de llevar a recintos más grandes. 

Resulta interesante el papel que ha tenido Rufus Wainwright en las últimas dos décadas pero es aún más tentador pensar en cómo será el futuro para un artista que, a cerca de cumplir 46 años, ha demostrado coherencia y ambición mezclando libremente su fascinación por lo lírico y la canción de autor, porque si nadie más está dando con lo que busca él lo está haciendo por si mismo. 

Roberto Carreño, Barcelona