Una ley para garantizar un 20% de programación de música chilena en radios se discute en el Congreso. ¿Será que el nivel de la música chilena es tan bajo que se tiene que obligar a las radios a difundirla? Actualmente el 10% de la música que se programa en radios es producción nacional.
Pero desde cuándo tocar guitarra y tener una banda es mérito suficiente para sonar en las radios. Una cosa es la opción y otra es el oportunismo que algunos querrán aprovechar con una ley que obliga a programar música chilena pero que no aclara a cuál tipo o artistas se trata. El catalogo es demasiado amplio pero las opciones se pueden reducir fácilmente.
Sucede que cada uno de nosotros tendrá su propia visión de la música chilena que vale la pena conocer y no hay músicos con más derechos que otros, aunque algunos han tenido mayores oportunidades. Pero las radios son empresas y un negocio ¿por qué deden asumir la responsabilidad de la difusión de la música nacional? Aunque sonar en el FM en ningún caso es decisivo para nadie, muchos tuvieron un número uno y desaparecieron porque no tocan en vivo ni desarrollaron repertorio.
Las radios tienen un perfil editorial, como cualquier otro medio de comunicación y no tiene porque ser un medio de caridad para todo quien quiera tomar una guitarra y hacer música. Para eso está Internet.