28 jun 2019

La falta de Milagro

Han pasado ocho años desde 'San Sebastián' (QSC) el tercer y más recomendado trabajo de Fernando Milagros que entusiasmó a la crítica local y medios extranjeros que lo destacaban como un artista con cualidades propias para el pop-rock latinoamericano y un single como 'Piedra Angular' sonando bastante en las radios. Pero salieron otros dos discos, los años, nuevos singles y nada cambió. 

Su tema más nuevo 'Serpiente' (producción habitual de Cristian Heyne) ratifica su ánimo para seguir haciendo canciones aunque -definitivamente- está por debajo de la convicción que mostraba en sus más escuchados sencillos ('Reina Japonesa' o 'Puzzle') habituales en la programación de varias radios y entre sus mejores reproducciones en Spotify

En el 2012 hizo uno de los mejores shows de La Cumbre del Rock Chileno "la nueva generación" en el Parque Cerrillos pero no pasó mucho con el público, no conectó. Y sus conciertos siguen siendo en recintos pequeños, estuvo en Lollapalooza Chile con poquita audiencia y el entusiasmo ha decantado. Oportunidades no le han faltado. 

Milagros emergió hace poco más de una década a la par de otros cantautores como Gepe y Manuel García todos distintos pero que crecieron enormemente en números y marca con similar presencia radial y páginas impresas. Incluso a Fernando Milagros le ha favorecido que -al igual que el argentino Kevin Johansen- es gusto de periodistas y las revistas femeninas lo perfilaron como músico "mino" atención que ya hubiesen querido baladistas como Mario Guerrero o Andrés de León

Se podría culpar a los últimos discos, 'Nuevo Sol' más liviano y 'Milagros' demasiado intenso, pero aquí hay un asunto más profundo que tiene que ver con la empatía. Puedes tener los recursos, el mejor productor, sello influyente, la mejor prensa y buenas canciones pero sin un grado de cercanía con los que escuchan lo necesario no se produce. Su puesta en vivo es fría, en entrevistas es parco y el personaje de músico complejo funciona solo para los genios que no es el caso, en lo absoluto. Para genialidades de un músico inquietante e incomprendido mejor escuchar a Cristian Fiebre

Pero la falta de empatía en la música actual no es excepción de Milagros solo que otros de sus colegas lo han suplido agregando banderas de ciertas causas contingentes (LGTBI, feminismo) y eso tiene público fijo, vende. Milagros necesita urgente un relato o de un milagro antes que nada más pase o deje de pasar. 


26 jun 2019

Américo, Me duele la guatita

El cantante tropical anunció hace unas semanas que cancelaba una gira de conciertos por Estados Unidos por razones de salud, un comunicado de alta repercusión en la prensa chilena que resaltó la baja del tour norteamericano. Pero nadie dijo ni revisó que solo se trataba de un show cancelado en Filadelfia y no hay rastro de que fuese una gira. 

Han pasado 10 años del impacto de Américo con los discos 'A morir' y 'Así es' (2008) que desprendieron sus más grandes éxitos (El embrujo, Te vas, Que levante la mano) que lo llevaron a triunfar en el imponente Festival de Viña del Mar en dos años consecutivos. Domingo Vega, su nombre real, se instaló como un protagonista de la música popular chilena de la última década. 

Pero han pasado 10 años, cuatro discos, una docena de sencillos, giras, contratos con sellos, polémicas faranduleras hasta un libro y su postergada -y publicitada- mudanza a Miami. Américo ha sabido mantenerse en la primera línea del escenario local pero todo amparado en lo que fue el éxito de sus tres canciones de hace una década, lo demás solo ha sido marketing. 

Tuvo excesos (varios confesados en su libro), desordenes artísticos (como imitar a Marc Anthony), cruzar a la balada y volver a su origen en la cumbia pero las canciones nuevas pasan como una versión repetitiva de si mismo. Probablemente 'Mi Deseo' (2018) fue su single mejor logrado aunque que no suena como un tema propio, puede ser cualquier cantante centroamericano, y sus números en Spotify no despegan del promedio local (400 mil escuchas mensuales). Los artistas que salen de Chile y hacen tours en el extranjero promedian el millón en la plataforma. 

Por eso no sorprende que a solo días de cancelar el "tour" por Estados Unidos por una operación anunciara un concierto en Chile, su medio ambiente más natural, porque vivir en Miami no significa que esté realmente haciendo carrera en Norteamérica. Alberto Plaza con bastante más trayectoria internacional ha asumido que vive en esa ciudad porque le gusta y no porque triunfe en Estados Unidos. En el caso de Américo pudo entrar en países vecinos como Perú, Bolivia, Ecuador y Argentina pero su relación se diluyó y en los shows europeos son para la comunidad chilena y latinos residentes, no por proyección como suele imaginarse. 

"Me duele la guatita" decía la pequeña Christell cuando su papá la obligaba a cantar en un show en Calama, un episodio como punto de quiebre para su carrera que se iría a México (ida y vuelta). Lo que está haciendo Américo con generar un escándalo anunciando una operación rutinaria a través de los medios fue para -nuevamente contar- que vive en Estados Unidos y promocionar otro show en Santiago, la prueba de que su estrategia ha sido tan efectiva como desesperada.  


25 jun 2019

La farsa de los 22 Discos de Platino

Archivo revista Billboard 1995
Hubo años en que la industria del disco entregaba los Discos de Oro por 15.000 casetes vendidos en la sucursal de la Feria del Disco del Paseo Ahumada con la dueña de la cadena Marta González sonriendo en la foto. Eran los tiempos del formato físico y la irrupción del Disco Compacto en los noventa aunque en Chile se vendían más casetes. Los Prisioneros, La Ley, Myriam Hernández, Nicole o hasta la actriz Aline Kuppenheim con la banda sonora de El Amor Está de Moda recibieron sus Discos de Oro. Por lo mucho que sonaron y ventas generales (hasta 9 millones de copias al año en Chile) se puede asumir que esos premios fueron reales y legítimos. 

Pero también la industria discográfica mentía y la IFPI (Asociación de Productores Fonográficos) entregaba Disco de Oro y Platino por discos facturados que los sellos ponían en tiendas pero que no necesariamente se vendieron, muchos terminaron desvalorizados en los descartes y ofertas o definitivamente cremados. Estos premios daban la sensación de éxito, servían en la promoción y para la rendición de cuenta a las centrales internacionales de la compañía (cumplir metas). 

Aunque desde el año 2000 con la competencia del CD "pirata" (la copia ilegal) en las calles provocó la primera baja en las ventas en un proceso irremontable para los sellos, los casetes se dejaron de producir en el 2003 y los Disco de Oro se entregaban por 10 mil copias y 20 mil para Platino. En eso TVN lanzó Rojo fama contra fama y los sellos encontraron una última opción para facturar incluyendo el total desprestigio de los Disco de Oro y Platino que entregaban a diario y por marketing con los humildes competidores llorando en pantalla. Pero ¿Dónde terminó esa música? es fácil encontrarlos tirados en el persa Bio-Bio pero leyendo los nombres de quienes estaban detrás de todo eso es fácil pensar que muchas de esas copias ni siquiera se fabricaron. 

El mismo ejecutivo que regaló a destajo los premios a los cantantes del Rojo le inventó un Disco de Diamante a Américo años después por 100.000 copias de toda su discografía, premio que sólo había recibido Luis Miguel por 1 millón 700 mil de discos vendidos en el país el año '99 (no vamos a cuestionar el arrastre del Sol de México en Chile). Según el gerente de Feria Music los 100.000 discos de Américo en el 2010 correspondían al millón de los mejores tiempos, una suposición bien cuestionable considerando que el último gran suceso local (Vivo de Joe Vasconcellos) vendió 140.000 copias legales en pleno peak del CD pirata y el álbum más vendido de "Luismi" sobrepasó los 200.000. 

Foto Twitter
Es evidente que el modelo cambió y que los números son distintos pero lo de Universal entregando 22 discos de platino a su artista promesa por descargas digitales es una farsa que los medios de comunicación deberían cuestionar o al menos preguntarse de dónde sale tanta distinción. Según la compañía son 110.000 ventas (22 x Platino) para 'Rosa' de la cantante juvenil Cami, una categoría que no logró Illapu 'En Estos Días' (1993) ni el 'MTV Unplugged' de Los Tres (1996) que "apenas" fueron 7 veces Platino por 175.000 copias. Evidente que no es comparable y suponer que lo del pasado es equivalente al consumo actual es fantasear más de la cuenta. 

Que los sellos actualmente estén premiando a sus artistas por escuchas online y descargas es parte de la promoción pero esto debería llamarse de otra forma con las medidas del mundo digital. Por ejemplo en el 2018 su sello le entregó Disco de Oro a Augusto Shuster por 4 millones de escuchas sumando todas sus reproducciones en plataformas, eso en cualquier mercado es muy poco o nada, pero le tomaron la foto con el premio en pleno Festival de Viña del Mar para intentar justificar su presencia (que de no ser por lo carilindo ese show no se sostiene) dato que la prensa publicó sin una sola coma de duda. 

Lo más absurdo es que los sellos -en el mundo- están entregando Disco de Oro por un single cuando el propio premio dice otra cosa, y algunos por descargas, a otros por escuchas. 

Así como el sistema cambió y las ventas de ayer no tienen comparación con el consumo actual lo justo es que suban la exigencia porque es mucho fácil descargar un disco que ir hasta la Feria del Disco a preguntar si tienen el casete, que no esté agotado, y poder pagar lo que cuesta.